Espacio donde el mundo es nuestro

jueves, 11 de enero de 2007

Capote! Capote!

Se suponía que la jornada empezaría a las nueve de la noche, con la fresca. A eso de las 21:32, la situación era la siguiente, Sandra (la dueña de casa) y Luís enfrascados en política internacional, Juan, no se si desmayado de hambre o dormitando y Yo paseándome para calmar la pitón y todo debido a que nuestro querido y siempre bien ponderado Nelson estaba atrasado. Un puntapié para que despertara la bella durmiente, quién de inmediato dijo las palabras mágicas: ¡Tengo hambre! Y cual coro de querubines fue acompañado por un ¡Yo también! La señora Carmen debió escuchar lo famélica de nuestras voces porque se puso de inmediato a servir.
22:12 hace su entrada el personaje de la noche. Obviamente se llevo, aparte de los saludos y reprimendas, de todos los cordiales saludos.
La señora Carmen sigue con buena mano, las papas redonditas y en su punto, la lechuga verde y en tiritas, nada que decir con las rodajas de los tomates. La carne de partirla sin utilizar el cuchillo, además agrego algo nuevo esta vez, salsa de champiñones que fue devorada por el atrasado pensando que era sopa.
Sandia o melón. Mala idea la mía de pedir sandia, parecía globo de lo hinchado.
Y se da inicio a la jornada que solo será brisca como lo establece los reglamentos. Se sortean las parejas a la suerte de los reyes, primera pareja.
Me asignaron al atrasado que tiene una suerte que la quisiéramos todos, pero tiene que andar con las luces encendidas para hacer efectiva esa bendición.
Primera pata y ya vamos en el tercer juego perdido consecutivo y ningún atisbo de rayar algo. Pintábamos para huevito, cero. Las reparto sin darle mucho entusiasmo a la mezcla de las cartas. Buen juego pero falto el gramo para el kilo, empatamos. No era una noche afortunada que esperaba. Afortunado en el amor y mal en el juego alguien comento en voz alta mientras se repartían las cartas nuevamente, menos yo pensé.
Concentrado en ver mis cartas que brillaban por los tantos oros que tenia en la mano, no vi cuales fueron las primeras cartas jugadas, ni en la segunda vuelta, sino hasta que escuche la voz de la diosa fortuna, perdón, mi compañero: Espero que sepa jugar brisca. Un jugador de brisca no debe hablar ni musitar, apenas respirar, pero ya estamos acostumbrados a saltarnos algunas reglas, cuando nos convienen, que paso inadvertido.
Mis oros brillaban mas que nunca, una copa y un basto guacho se despidieron en las vueltas siguientes. Estábamos en control, teníamos el poder. Una rápida mirada a los contrincantes, buenos jugadores de poker, ninguna mueca que los delatara que se les venia lo peor.
Ultima vuelta y se acaba y no han recogido ninguna baza ni lo harán porque esta escrito que era nuestro el capote. Para los que no son entendidos en el juego de la brisca, según la Real Academia Española:
capote.
(Del fr. capot).
dar ~.
1. fr. coloq. Dicho de un jugador: En algunos juegos de naipes, hacer todas las bazas en una mano.
2. fr. coloq. Dicho de un jugador: Hacer que otro se quede sin hacer baza en una mano.
Real Academia Española © Todos los derechos reservados

No comentare la algarabía que siguieron en los tres minutos restantes, no nos dieron más tiempo para celebrar. Hacia años que no era participe en hacer un capote pero si en contra y no es una situación muy agradable.
Comienza la segunda pata que transcurre normal y peleándose monito a monito, como dice un amigo. El marcador 3 a 2 a favor nuestro.
Al ver mis cartas tuve que contener la mueca de alegría como buen jugador de poker. Tenía 6 triunfos de los grandes, excepto el caballo. Las otras cartas eran un as y un tres. Mano ganadora y cerrábamos la pata.
Pero no contaba con la astucia de mi compañero que medio dormido, medio pajaroneando , en la segunda jugada, al iniciarla yo con arrastre, se le ocurre descansar un tres huacho que tenia. Estaba obligado a jugar su único triunfo y se lo guarda el muy astuto, cuando se lo habían visto todos. Ni cara de sorprendido puso cuando tuvo que decir que había renunciado. Irrepetible fue el rosario de epítetos que le dije.
La cara de relajo de los contrincantes era de esperar, tenían la gran oportunidad de ganar la pata definitoria.
No les relatare la ultima partida porque la verdad no la recuerdo, solo que se jugo bien a la brisca y con el cuarenta se gano el juego, la pata y el partido.
El relajo se vino completo, hacíamos fila para ir al baño, mi compañero hasta pido un café para relajarse.
Como es la costumbre del dueño de casa, sale a dejar a sus invitados al estacionamiento, pero esta vez, no se porque razón, nos hizo salir por la puerta de servicio, oscuro y tenebroso, haciéndole el quite a los mastines, para que no nos orinaran! Cosas del juego.
Hasta el próximo capote, perdón jugada.

6 comentarios:

Anónimo dijo...

"La vida no es facil".....pero felicito a los ganadores/contrincantes.....ya que fue inedito....Creo que con la suerte totalmente de ese lado, debieron ganar mucho más rapido. En definitiva, en la noche jugamos 30 partidos: 1 empatado, 15 ganados por Juan y Luis y 14 ganados por la pareja SUERTUDA (Oscar y Nelson)...lo que me "pica" es que no se dan ni cuenta de lo que estan haciendo y GANAN...pierden la cuenta de los "triunfos", de los "monos"...Y GANAN...Felicitaciones para mis amigos y lo paso muy bien. Invito a otros a sumarse.

Anónimo dijo...

No saben el gusto que me da, que despues de tantos años sigan manteniendo una amistad tan fuerte y sobre todo que cuando se juntan los cuatro están tan concentrados en la partida que no hacen caso a nadie.
Realmente me encanta ver lo bien que la pasan.(Sobre todo hay uno que está mejor que todos....Cual será? Será el de la taza amarilla??????.... adivinen.
Saludos.

Anónimo dijo...

Acerca del capote :
Como todos los deportes ( y la vida misma ), los juegos se ganan por la calidad y sabiduria en el juego, o por la cueva o raja ( suerte ) del jugador. Como se habrán enterado nuestros amigos esparcidos por el mundo, la " gran " victoria conseguida por nuestros rivales y mostrada al mundo como Capote, no fue otra que una gran suerte, que a pesar de las equivocaciones, los " olvidos " de la cuenta de triunfos,y sobretodo que ni se enteraron que estaban ganando hasta el final del juego!!! Pero así es el juego, el imponderable de la raja está siempre presente. Talvés eso hace que el juego sea tan entretenido y tengamos tantas satisfacciones. Felicito a los ganadores y comparto sus alegrias, ya que nuestra pareja ha ganado por capote en muchísimas ocasiones, donde cada una ha sido, no por suerte, sino una fina preparación de cada jugada ( perdonen la modestia ).
Ya comentaremos la revancha, que se viene " sin piedad ".
Para terminar, quiero relatar un episodio, que refleja el nivel de suerte del rival en cuestión. En esa ocasión, me tocó distribuir las cartas y me dí una mano ganadora de 9 truinfos, me faltó una!!!, bueno ya habrán adivinado, que el suertudo de costumbre se quedó con el triunfo restante, que por supuesto era el as ( carta máxima del naipe. Por lo tanto no se pudo dar el capote.
Un abrazo
Lucho

Unknown dijo...

Notable...
nada que decir...ese es el poeta de mi padre..ni que se llamara Oscar Neruda..
Bueno, besos para todos, muy buena idea...
Camila

Anónimo dijo...

nada mas gratificante que capotear a alguien, jaja

buen blog

Saludos.

Unknown dijo...

Amigos una gran.consulta.
Al iniciar una.pata entre tres, si hago capote, se gana inmediatamente la pata o solo dos puntos.
Gracias por sus comentarios